Federación de Periodistas Deportivos de Andalucía > 2015 > 06 > 17 > Eduardo Herrera defiende en el Congreso Mundial de Entrenadores de fútbol que los jóvenes talentos no se vayan de Andalucía

Eduardo Herrera defiende en el Congreso Mundial de Entrenadores de fútbol que los jóvenes talentos no se vayan de Andalucía

El Congreso Mundial de Entrenadores, celebrado en Sevilla con motivo del Centenario de la Real Federación Andaluza de Fútbol  terminó como empezó, con un mensaje concreto y serio del presidente Eduardo Herrera: “Los niños no se venden, no podemos permitir que los padres vean su solución económica en sus hijos jugando al fútbol”.

Ante tres mil entrenadores de todos los países que estuvieron en Sevilla este fin de semana, Herrera fue rotundo. Quiso que todos los entrenadores llevaran un mensaje a sus clubes y que los medios de comunicación se hicieran eco a través de la AEPD, que colaboró desde el primer día con el Congreso. Para Eduardo Herrera, directivo también de la RFEF, la situación es crítica y hay que tomar medidas: “En España los niños no se venden. En aras del deporte no se debe romper la unidad familiar. Un niño en periodo de formación como persona debe estar en el seno de la familia hasta cierta edad, debe estar con sus padres mientras esté en periodo de escolarización obligatoria”.

Herrera tiene una gran experiencia en el mundo del fútbol, por ello dice que “para ser un gran futbolista no hay que estar ni en el Real Madrid, ni en el Valladolid ni en el Valencia con 10 ó 12 años. Debe estar en el club de su barrio, su pueblo o su ciudad, estudiando en su colegio y comiendo el cocidito de su madre, no en el rancho de la Masía, por ejemplo”.

El presidente de la RFAF quiere ser respetuoso con el Barcelona y sabe del buen trabajo de la Masía, pero puntualiza que “sé que en la Masía tratan muy bien a los niños, pero 300 niños comiendo todos los días un menú en un comedor, aunque sea de lujo, eso es comer rancho. Es mejor el cocidito de su casa y acompañado de su mamá. Además, el niño o la niña tienen muchas carencias psicológicas a muchos kilómetros de su casa. No podemos permitir que los padres vean su salvación económica en forma de billetes”.

Pero Eduardo Herrera fue más allá cuando le habló a los tres mil entrenadores asistentes al Congreso: “No podemos admitir que sean los padres los que vendan a los niños en el fútbol. No podemos permitir que los pongan en manos de traficantes de niños, de tal forma que se venda a tanto el kilo de niño. Los clubes no deben permitir que se vendan niños a clubes grandes con diez o doce años. Si se controlan los que vienen del extranjero, porqué no se hace también aquí, de ciudad en ciudad”.

En todo momento el presidente de la Real Federación Andaluza de Fútbol apuntó que en las Federaciones se tienen que tomar medidas, que los clubes deben ser ayudados por los gobernantes y que los clubes modestos, sin ánimo de lucro, deben tener facilidades para controlar a los niños y niñas y para darles campos para jugar y no romper la unidad familiar, evitando que el niño sea visto “como un montón de billetes en los próximos años si llega a estrella de un club grande de fútbol español”.

Desde su posición y con experiencia, Herrera pide la ayuda de todos los entrenadores y de todos los organismos oficiales, consciente de que “no se puede tratar a los clubes modestos como si fueran el Madrid o el Atlético. Hay que comprender que el fútbol existe gracias a muchísimas personas que entregan su tiempo para que los más pequeños puedan practicar deporte”.