Con el copatrocinio de la Fundación ONCE, el libro recibió su puesta de largo en la delegación territorial andaluza de la ONCE con la presidencia del delegado territorial de la entidad, Patricio Cárceles; el director gerente de la Fundación, Carlos Cano; el delegado de la Consejería de Cultura y Deporte, Francisco Díaz; y la presencia de medio centenar de los protagonistas de las más de 200 páginas de que consta la investigación.
Para Cárceles, este libro es un “magnífico trabajo que sitúa al mismo nivel a los olímpicos y paralímpicos”, a los que calificó de “ejemplo para la sociedad”. “Esta obra ha puesto rostro a historias de superación y éxito y supone un paso importante en la consecución de la integración total de deportistas discapacitados”, matizó.
Por su parte, Carlos Cano resaltó con este libro “la Fundación progresa en su labor científico-deportiva en el ámbito de la investigación historiográfica del Olimpismo en Andalucía, habiendo editado previamente otros dos estudios en la materia y, paralelamente, otros seis de mayor amplitud en el campo competitivo y científico”.
“Son proyectos editoriales con los que pretendemos contribuir a un mejor conocimiento entre la sociedad andaluza de las personas que han llevado el nombre de nuestra tierra a la más grandes manifestaciones deportivas”, concluyó el director de la Fundación.
Nuevos horizontes en la historia deportiva andaluza
Para los autores de “Olímpicos y Paralímpicos Andaluces”, la gran aportación de la obra presentada se cifra en la “identificación pormenorizada de los andaluces que han competido en unos Juegos Paralímpicos, circunstancia que hasta la fecha era desconocida”.
Así, el libro revela que 98 andaluces han estado presentes en 9 de las 13 ediciones de los Juegos Paralímpicos de Verano y en 4 de las 10 versiones de invierno, habiendo acumulado entre todos 195 participaciones, 77 medallas (29 de oro) y 127 diplomas.
Estos 98 andaluces han competido en 15 modalidades deportivas -13 de verano y 2 invernales-, destacando el atletismo, con 23 deportistas, seguido del baloncesto y ciclismo, con 16, y judo y tenis de mesa, con 9 cada una.
En el capítulo de nombres, sobresalen los del nadador gaditano Sebastián Rodríguez, el más laureado de la historia, con 13 medallas, la onubense Mari Fi Monterrubio, primera paralímpica andaluza, merced a su participación en Nueva York 1984, y Antonio Delgado, uno de los ocho andaluces pioneros en los Juegos de Toronto 1976 y el primer campeón paralímpico del deporte andaluz.
Asimismo, la obra pone de relevancia las cinco participaciones en Juegos Paralímpicos que comparten como cifra récord el baloncestista malagueño Antonio Henares, el palista granadino Manuel Robles y el esquiador y ciclista Miguel Ángel Pérez Tello. Por ediciones, el deporte andaluz logró el máximo número de representantes en los Juegos de Atlanta 1996, con 34 clasificados.
Actualización y nuevos nombres
Por su parte, en el ámbito olímpico, la obra de Díaz y Rodríguez supone una actualización de los compendios publicados en 2004 y 2008 por la Fundación Andalucía Olímpica, así como la plasmación de los resultados emanados de las investigaciones sobre deportistas andaluces en las primeras ediciones de los Juegos.
Con todo ello, el estudio refleja que desde 1900, año del debut del jerezano Mauricio Álvarez de las Asturias en los segundos Juegos de la Era Moderna (París 1900), primer español olímpico de la historia, hasta Vancouver 2010, cuando el deporte andaluz logró la cifra récord de 5 deportistas en unos Juegos de Invierno, han sido 184 los andaluces olímpicos repartidos en 20 ediciones estivales y 10 invernales.
Estos 184 olímpicos han sumado 264 participaciones entre los dos eventos, con un resultado de 21 medallas (6 de oro) y 63 diplomas, destacando los dos podios de la regatista malagueña Theresa Zabell (sendos oros en 1992 y 1996), el boxeador cordobés Rafael Lozano (bronce en 1996 y plata en 2000) y el tenista granadino Manuel Orantes (dos platas de exhibición en 1968).
Otros nombres propios de la historia del Olimpismo andaluz son los de la esquiadora cordobesa Ernestina Maenza, primera olímpica andaluza merced a su debut en los Juegos de Invierno de 1936, en Garmisch-Partenkirchen (Alemania); el polista sevillano Leopoldo Sáinz de la Maza, primer medallista (plata en 1920); o la esquiadora granadina María José Rienda y la nadadora malagueña María Peláez, que suman cada una 5 participaciones en Juegos Olímpicos.
Por modalidades deportivas, la presencia de Andalucía en los Juegos Olímpicos ha sido especialmente notoria en atletismo (29 deportistas), remo (17), fútbol (12), natación e hípica (11). Por su parte, en Barcelona 1992 se alcanzó el número máximo de representantes andaluces, con 38.
La Fundación Andalucía Olímpica, creada en 1997 por la Junta de Andalucía y el Comité Olímpico Español, ha otorgado desde su creación cerca de 4.000 becas a deportistas y técnicos y destinado más de 9,5 millones de euros al deporte andaluz con objetivo olímpico y paralímpico.
En la actualidad, la Fundación Andalucía Olímpica está patrocinada por numerosas entidades como Canal Sur, Cruzcampo, El Corte Inglés, Coca-Cola, CajaGranada, Cajamar, Cajasol, CEA y Estadio Olímpico, contando como Socios Institucionales con las 8 Diputaciones Provinciales y los Ayuntamientos de Cádiz, Jaén, Málaga, Sevilla, Algeciras y Dos Hermanas, así como con los Ayuntamientos Colaboradores de Alcalá de Guadaíra, Almonte, Antequera, El Ejido, El Puerto de Santa María, La Rinconada, La Zubia, Linares, Loja, Maracena y San Fernando.
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